Y sí, su magnificencia sigue siendo aplastante. Un tema que he mencionado varias veces (y es el tipo de cosas que no importa cuantas veces se diga, y bien sabiendo que toda cosa que se diga de ellos siempre quedará corta de la cosa real, siempre es necesario volver a repetirlo) es la grandeza de los últimos cuartetos de cuerda. Pero creo que no he ensalzado lo suficiente es el cuarteto op. 127 en Mi bemol major.
Escuchemos varios cuartetos tocando el finale del movimiento (está es la única música en la cual me gusta jugar el irrelevante juego de comparar versiones)
El Italiano
El Busch (la grabación es antigua, así que el sonido no es de lo mejor; pero la interpretación sigue siendo magnífica)
El Takács
A veces creo que es gente como Beethoven lo unico que hace justificable la existencia de nuestra pobre especie.