Ya ni sé porque demonios hago la más mínima pretensión que este blog es sobre sociología -ok. en la noche escribo alguna cosa-. Así que volvamos a lo que realmente tiene interés. En otras palabras, a la música.
Mostrando mi permanente mal juicio hace un buen tiempo que no escuchaba mucho Bach. Pero hace unos cuantos días decidí volver a escuchar el Clave bien Temperado. Gloriosos días, que otra cosa se puede decir. Y como todo glorioso día que sólo depende de uno, ¿que estaba haciendo que no escuchaba a Bach? A veces
El Preludio y Fuga en Do Mayor con el que parte la obra (en la versión de Friedrich Gulda)
Pero cualquier parte tiene la misma calidad, y además para escucharlo en clavecín y no en piano. El Preludio y Fuga en Sol Mayor del Libro II (Kenneth Gilbert)
Y además porque también es glorioso. The Bells de William Byrd.