A veces uno justo lee los textos precisos después de escribir lo que uno quería escribir:
‘En el nuevo mercado de todos contra todos -promovido por la ideología dominante-no es sorprendente que algunos de los miembros de la sociedad menos favorecidos busquen justicia dejando de lado el marco normativo existente’ (Alejandro Portes y Kelly Hoffman, Las estructuras de clase en América Latina, página 585, en Estratificación y movilidad social en América Latina, Franco, León y Atria (coordinadores), LOM: 2007).
El caso es que el mercado de todos contra todos no es promovido por la ideología dominante. La ideología del modelo (es cosa de leer a Hayek o a Friedmann) no se basa en la idea de todos contra todos.
El todos contra todos es cómo la izquierda lee el modelo, no cómo el modelo se ve a sí mismo.
Si, como creo, es la interpretación de izquierda del modelo la que es común en la sociedad, aun cuando el modelo de izquierda ya no representa una alternativa para esa misma sociedad, esto se debería a las razones esbozadas en el post anterior sobre teoría de Chile:
- Que el modelo neoliberal derrotó negativamente a las ideologías izquierdizantes: O sea, en el debate ideológico, las razones a favor de las ideologías de izquierda resultaron todas poco creíbles para la sociedad.
- Pero que el modelo neoliberal no derrotó positivamente a las ideologías izquierdiszantes: O sea, en el debate ideológico, no se impusieron las razones a favor del modelo.
Y, por tanto, tendríamos una sociedad que tiene un modelo que ve como posible, pero que lo observa desde otro modelo distinto.